Santarem
EL QUE VIAJA SIEMPRE LLEGA A SU FIN, EL QUE PEREGRINA VUELVE A COMENZAR
Conoce un poco más sobre este destino
En esta ciudad portuguesa aconteció en el año 1247 un Milagro Eurarístico que se conserva hasta hoy día. Una mujer segura de que su esposo le era infiel, recurrió a una hechizera para que volviera a enamorarse de ella, esto por la paga de una hostia consagrada. Con astucia, tras pasar a comulgar, la mujer salio con la hostia de la iglesia de San Esteban y envolvió la hostia con un pañuelo.
La hostia comenzó a sangrar, sin que la mujer se diera cuenta. Fueron los viandantes los que se percataron pensando que la sangre era de la mujer. La mujer atemorizada fue a su casa y escondió la hostia aún sangrante en un baúl. Mientras dormían, ella y su esposo despertaron ante una luz radiante que salía del baúl. La mujer contó lo sucedido al esposo y arrepentidos pasaron la noche velando en adoración al Santísimo Sacramento.
Al otro día la hostia fue llevada en procesión por el sacerdote de San Esteban; continuó sangrando durante tres días y fue depositada en un ostensorio. Cada año, el segundo domingo de abril, se realiza una procesión con el milagro desde la casa del matrimonio hasta la Iglesia.
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